"La bailarina es una manifestación fisica de la música"

La danza como expresión de sentimientos

La mujer de hoy esta inmersa en una sociedad cambiante, y cuenta con características propias que la diferencian y la distinguen en su forma de pensar, y también en la de bailar. Así, se enfrenta al baile con una gran alegría, lo que convierte su experiencia en un hermoso viaje entre el movimiento y la música, renueva la sangre de sus arterias y le hace encontrar solaz y olvido para sus preocupaciones diarias.

Ella se transforma con el movimiento, pues despierta en su interior los sentimientos y sensaciones ocultas; casi olvidadas, mientras se relaja la tensión acumulada en su cuerpo.

La mujer danza con sus más profundos sentimientos, dejando escapar lo que encierra en su interior como un volcán. Parece haber esperado durante largo tiempo para dejar que su cuerpo expresara sin palabras sus más ardientes secretos.

En su danza, está encerrada la profundidad de los proverbios, la magnificencia de la magia y las mayores paradojas: dolor, amor, esperanza, alegría, reto, liberación de ataduras y una llamada a la libertad. Este baile encierra el amor de la mujer por el hombre oriental y su odio hacia él, la tristeza, la alegría, la belleza, la inocencia, la terquedad, el perdón, la docilidad, el rencor y los celos.

El encanto de este baile y su belleza se muestra a menudo en los cambios que afectan repentinamente a quien la ejecuta, que no tiene que ser necesariamente una especialista en baile. Dichos cambios se manifiestan en el comportamiento de la misma, en las relaciones que mantiene con su entorno y en otros elementos de orden corporal y espiritual. La personalidad de cada mujer se muestra clarísimamente en cada movimiento que se realiza: actúa de una forma más audaz, se siente más segura de sí misma y cambia el temor por la valentía en un corto período.

Muchas se han detenido en los primeros pasos de la danza del vientre con el rostro enrojecido de vergüenza sintiendo ansiedad, miedo. Pero estas sensaciones desaparecen inmediatamente ya que, a pesar de que en las primeras clases la timidez es una traba con la que hay que contar, pronto la alumna descubre grandes cosas en la práctica de esta danza.

La danza del vientre es, por tanto, una bella jornada con el espíritu, que expresa las posibilidades escondidas dentro del cuerpo.


La danza mágica del vientre- Shokry Mohamed

jueves, 14 de abril de 2011

MÚSICA

La música se trata de un idioma universal, es posible que fuera uno de los “primeros lenguajes” utilizados por los pueblos antes de que se conociera el idioma. Desde la antigüedad, ha sido prestigiosa, con sus diversos estilos (ruidosa,  suave, alegre y conmovedora).
La evolución del instrumento musical no sólo demuestra el desarrollo de la música, sino también el del espíritu, la ideología y la vida humana.
Cuando una persona consigue expresar sus ideas a través de la música se siente más sosegada, ya que encuentra el modo de deshacerse de sus reacciones y deseos retenidos.
Es conocido que algunas características de los instrumentos musicales orientales están basadas en los cuatro elementos naturales: fuego, agua, aire, tierra. Los árabes la utilizaron desde la antigüedad como terapia para diversas enfermedades y  hoy en día muchos psicólogos  también la utilizan como terapia, incluso recomiendan a sus pacientes a practicar este baile. 

Interpretación musical

La bailarina se convierte en una manifestación física de la música, usa su cuerpo para expresar los elementos rítmicos y emotivos de una composición. Cada instrumento tiende a tener resonancia con una determinada parte del cuerpo, o provocar un movimiento particular en la danza del vientre.
Ella es responsable de la dirección que la música toma. Los patrones son simples, pero dinámicos, y siempre hay lugar para la improvisación. Por ello la cualidad emotiva que caracteriza tanto a la música de Medio Oriente.
La música de danza del vientre utiliza muchas modalidades de composición, en las cuales el diálogo instrumental provoca una respuesta acorde en la bailarina, como el taqsim, llamada-respuesta, ritmo repetitivo, golpes o acentos, orquesta completa.
Generalmente los instrumentos solistas se registran fácilmente por sus singulares cualidades emotivas. La bailarina señala esos instrumentos, quedándose en posición fija, usando la correspondiente parte de su cuerpo para interpretar el sentir del sonido.
La danza del vientre es principalmente intuitiva. Pero la bailarina puede interpretar los estados de ánimos musicales de una composición, si comprende los efectos de los instrumentos.
(Fuente: Ketty Shariff y Wendy Buenaventura) 

INSTRUMENTOS ÁRABES



- Nay: Flauta de junco. (Utilizada en la música árabe, turca y persa). Sus notas cautivan, son vacilantes y aireadas. Cualidad etérea que sugiere liviandad.







-Mizmar: Cuerno árabe que produce un zumbido similar al de las gaitas escocesas, pero más chillón.





- Oud o Laúd: Similar a la guitarra, de madera, con forma de pera. Se toca con uña o plectro. Creando al mismo tiempo melodía con sus notas y ritmo con su estilo rasgueado.




- Rababa o Rabel: Versión muy antigua del violín. Tiene una caja de madera de coco para la parte media del cuerpo. Se toca sentado, con cuerdas de crin de caballo unidas a un largo cuello.



- Quannon: Citara árabe y Turca (instrumentos del tipo del arpa). Hecho generalmente de madera de nuez. Cuerdas hechas de crin de caballo o metal. Instrumento de cualidad emotiva.




 
-Darbuka/tabla: Puede llevar una base de madera y parche de plástico. Produce variedad de tonos, desde grave, hasta un sonido levemente agudo. Desde los golpes con acentos sorpresivos a las vibraciones ondulantes. Da personalidad a la parte de percusión.


 

-MazharPertenece a la familia del pandero, tiene filas de platillos metálicos alrededor del borde. Se ejecuta a la altura de los hombros.




 
-Dof: Pertenece a la familia del pandero. No posee platillos. Se toca a la altura de los hombros.


 



-Req: Pandero liviano con capas de platillos. Produce un sonido delicado.


 
-Zills: Nombre turco para designar pequeños platillos metálicos llevados en los dedos, también conocidos como “sagat”. Generalmente la bailarina ejecuta una danza mientras toca este instrumento.